Características básicas del sistema político francés
La actual constitución francesa —de 1958— es la que fundamenta la llamada Quinta República, vigente en nuestros días. En ella se especifica que la jefatura del Estado queda ostentada por un Presidente, que es elegido por sufragio universal directo cada 5 años, y además se encarga de nombrar a un Primer Ministro para las funciones de jefatura del Gobierno[1].

En cualquier caso, hay que destacar que, desde entonces hasta la actualidad, en Francia se han dado tres cambios que resulta pertinente mencionar:
· El sistema actual de doble vuelta electoral —para los casos en los que ningún partido obtenga más de la mitad de los votos— se instaura por primera vez en las elecciones de 1965.
· En principio, hasta el año 2000 el Presidente ostentaba el cargo por un período de siete años.
· El número de escaños ha variado con el tiempo, sobre todo como consecuencia de procesos descolonizadores.
El sistema político francés es de tipo semi-presidencial, pues tiene rasgos característicos tanto del sistema Presidencial como del Parlamentario. No obstante, su conformación como tal es más producto del devenir histórico de dicho país que de una expresa planificación política, considerándose que fue en 1962 cuando terminaron por definirse los rasgos de este sistema[2].
En esencia —al menos usando el caso francés como ejemplo—, su estructura se basa en la existencia de un Presidente con amplios poderes, elegido directamente por los votantes, y un Primer Ministro con su gobierno elegidos —o acaso, dotados de confianza— por las Cámaras[3]. En conclusión, el Jefe del Estado fundamenta su legitimidad ante el electorado, mientras que el Jefe del Gobierno lo hace ante el Parlamento, que está conformado por diversos partidos y alianzas.
La tabla 1 permite comprobar que, en los 70 años que median entre 1951 y el presente, se llevaron a cabo 17 comicios, es decir, una vez cada 49 meses. Asimismo, de la misma tabla se infiere que el país se caracteriza por la presencia de numerosos partidos y alianzas, tanto nacionales como regionales o, fundamentados en torno a temas —como los partidos ecologistas: LV, ECO, VEC o EELV—. Algunos, como el Partido Comunista Francés —o PCF— son muy antiguos, mientras que otros, como el vigente La República En Marché —LREM— son de nueva fundación.

Sin embargo, el número de Primeros Ministros es muy superior al que se desprendería de la cantidad de elecciones llevadas a cabo en este período, aunque este punto es complejo de reflejar en la tabla, donde únicamente se resalta —en negrita— el primer partido que auspicia gobierno y Primer Ministro.
En cuanto a las alianzas de sus partidos, consignadas en la Asamblea Nacional, la mencionada tabla 1 es igualmente ilustrativa, pues señala con colores las coaliciones que se conformaron en cada legislatura en un primer momento —si bien esto solo es relevante durante la Cuarta República (1946-1958), en la que hubo 21 Primeros Ministros, de los cuales, 13 se insertarían dentro del marco temporal de este trabajo.
En este punto interesa comentar que a lo largo de las 15 elecciones correspondientes a esta Quinta República, han pasado 24 primeros ministros —considerando separadamente las dos ocasiones no consecutivas de Jacques Chirac—[5]. Esto implica 37 en 70 años, o lo que es lo mismo; uno cada 22 meses.

Volviendo a las alianzas, una vista general a los colores de la tabla 1 permite constatar distintos momentos en la historia francesa pero una tendencia al gobierno en solitario —o con pocos socios— siempre que esto ha sido posible. Sin embargo, es importante también destacar los diferentes momentos en los que algunos partidos políticos compitieron en bloques ya configurados —caso de la Unión de Demócratas por la República y los Republicanos Independientes, respectivamente UDR y RI, en los años 60—, o las grandes alianzas de la izquierda a finales de los 90.
En cualquier caso, si se calcula la media, las siete décadas de referencia salen aproximadamente a tres partidos en coalición por cada legislatura. De todos modos, es importante mencionar que, de estas 17 elecciones, solo el Partido Socialista —PS— y la Unión por un Movimiento Popular —UMP— han podido gobernar en solitario, aunque en varias ocasiones las alianzas hayan sido entre un partido muy fuerte —con la gran mayoría de los escaños necesarios— y otro con los asientos justos para formar coalición. Tal es el caso, por ejemplo, de la victoria de En Marché de 2017 o la de la propia UMP en 2002.
Los presidentes, no obstante, sí han tenido más estabilidad, ya que solo hubo dos en la Cuarta República, y otros ocho en la Quinta República[6]. Esto arroja un saldo de un presidente cada 100 meses, o lo que es lo mismo; uno cada —casi— nueve años. Esta diferencia, en cuanto a la estabilidad que presentan ambas figuras se denomina cohabitación —o ausencia de esta—, y es un rasgo muy característico del sistema político francés. Dicho término consiste en la coincidencia o falta de la misma —que es la situación de cohabitación propiamente dicha—, entre el partido del Presidente y el del Primer Ministro y su gobierno[7].

Al respecto de la cohabitación, cabe plantear que esta coincidencia facilita las labores de gobierno al Primer Ministro al tiempo que incide en el incremento de los poderes presidenciales y su autonomía. Por este motivo, se trata de un factor decisivo al momento de considerar el sistema semi-presidencial, ya que en los casos de cohabitación —es decir; cuando conviven dos ideologías diferentes— la política tenderá a asemejarse a la de un sistema parlamentario, mientras que en los casos en los que el Primer Ministro y Presidente son del mismo partido se asemejaría más a uno de corte presidencial[9].
La tabla 2 ilustra cronológicamente en qué momentos se han dado situaciones de cohabitación en Francia, evidenciándose en la misma que la tendencia en la Cuarta República fue a la ausencia de coincidencia ideológica entre el Primer Ministro y el Presidente, mientras que la Quinta República ha sido más estable en este sentido. Un recuento aproximado —sin considerar meses específicos en el cálculo— arroja que, en estos 70 años, 18 han sido de cohabitabilidad, situación que no ha vuelto a darse desde el 2002.
En cualquier caso —y a la vista de los colores de dicha tabla—, hay que destacar que, si bien en ocasiones no ha existido correspondencia entre partidos, sí hubo determinadas situaciones en las que, al menos, sí había cierta cercanía ideológica, como en gran parte de los años 60 o entre 1974 y 1976.
[1]Constitución de Francia (1958), arts. 6, 8 y 15.
https://es.wikisource.org/wiki/Constituci%C3%B3n_del_4_de_octubre_de_1958
[2]Chávarri Sidera, P. (2011), “El sistema político de Francia: la V República”, en Chávarri Sidera, P. y Delgado Sotillos, I. (Coords.), Sistemas políticos contemporáneos. Madrid, UNED, p. 124.
[3]Chavarri Sidera, P. y Delgado Sotillos, I. (2011), “El sistema político y sus elementos”, en Chávarri Sidera, P. y Delgado Sotillos, I. (Coords.), Sistemas políticos contemporáneos. Madrid, UNED, p. 36.
[4]Datos obtenidos de: http://www.parlgov.org, http://www.parties-and-elections.eu, y https://en.wikipedia.org.
[5] https://www.gouvernement.fr/en/former-prime-ministers-of-the-fifth-republic
[6] https://www.britannica.com/topic/list-of-presidents-of-France-2060874
[7] Chavarri Sidera, P. y Delgado Sotillos, I. (2011), “El sistema político y sus elementos”,… p. 36.
[8]Datos obtenidos de: http://www.parlgov.org, http://www.parties-and-elections.eu, https://en.wikipedia.org y Chávarri Sidera, P. (2011), “El sistema político de Francia: la V República”, … p. 135.
[9]Chávarri Sidera, P. (2011), “El sistema político de Francia: la V República”, … p. 133.