El precio del petróleo, principales causas y factores
Para entender el precio del petróleo hay que atender, principalmente, a cuatro aspectos principales: oferta, demanda, evolución del dólar y especulación financiera. A veces se añade un quinto elemento, el de la situación política internacional, aunque su impacto en el precio del petróleo se corresponde con una mezcla de los cuatro aspectos anteriores.
Oferta y demanda simple
Una primera aproximación muy gruesa al mercado del petróleo, sería usar un modelo clásico que cruza oferta y demanda de crudo, en las que los movimientos en las curvas y los desplazamientos de las curvas, explicarían la evolución del precio.

Un ejemplo de ello lo encontramos en el gráfico superior, en el que si la oferta permanece fija los desplazamientos de la curva de demanda hacen variar el precio por barril de manera más o menos aproximada a lo representado en el gráfico.

Como se observa en el segundo gráfico, un incremento de la oferta haría bajar el precio si la demanda permanece constante; y variaciones en la demanda harían bajar o subir el precio si la demanda disminuyese o se incrementase.
Sin embargo, aunque a largo plazo esa clase de modelos son útiles, en realidad no sirve para comprender el precio del petróleo en cada momento determinado.
Oferta y demanda compleja
Como se observa en el siguiente gráfico, los incrementos y decrementos del precio del barril de Brent no tiende a corresponderse con los aumentos o disminuciones en la oferta.

Lo primero que hay que entender es que la oferta del petróleo crudo no es el de un bien homogéneo, sino que como mínimo hay cuatro diferentes tipos de crudo: el ligero dulce, el ligero amargo, el pesado dulce y el pesado amargo.
Esto implica que el incremento de oferta de crudo de unos pozos de petróleo, puedan transformarse automáticamente en una oferta que pueda sustituir la carencia de oferta de otros pozos. La oferta de los diferentes petróleos no es igualitaria, sino que solamente el crudo de peor "calidad" del golfo Pérsico (muy barato en su coste de extracción) es el que puede responder mejor a los incrementos de la demanda.
Por otra parte, el la oferta de crudo hasta el consumidor final tiene se verá limitada por la capacidad y tipo de refinerías.
A grandes rasgos, hay dos tipos de refinerías. 1) Refinerías con un alto nivel de conversión, donde las moléculas de hidrocarburos sufren transformaciones profundas y se pueden obtener productos ligeros incluso de las fracciones pesadas de las materias primas disponibles. 2) Refinerías con ciclo simple (hidroskimming), donde el crudo es sometidos únicamente a un proceso de destilación, con tratamiento de la nafta virgen para la producción de una cantidad mínima de gasolina.
La conversión del petróleo crudo en combustibles varía bastante según el tipo de crudo y de refinería. Por ejemplo, con 10 toneladas de petróleo crudo pesado, se obtiene solo una tonelada de gasolina, pero 4 toneladas de gasoil y 5 toneladas de fueloil.

Por tanto, en el caso que la demanda de gasolina se incrementase en una tonelada, por el aumento de número de automóviles en un país en vías de desarrollo con fuerte crecimiento económico, podría implicar en un incremento de demanda de 10 toneladas de crudo pesado. El crudo aumentaría de precio, bajaría el precio de gasoil y fueloil, mientras el de gasolina se mantendría constante (por alinearse oferta y demanda).
Por lo tanto, un modelo clásico de oferta y demanda en el que se cruzan dos curvas, de ningún modo podría explicar el precio en un momento determinado por lo poco homogéneo que es crudo (hay varios tipos) y porque los derivados del petróleo no son bienes que puedan sustituirse entre sí.
Como puede observarse en los dos siguientes gráficos, la evolución del precio de la gasolina, gasoil, keroseno y el fueloil, no es completamente paralela en un mismo año, aunque si se suavizan las series la evolución de gasolina y diésel es casi idéntica


La oferta puede variar también por mejoras técnicas y las variaciones del precio del crudo. Los fantásticos progresos en EE.UU. con el shale-oil han permitido aumentar considerablemente la oferta de crudo a precios relativamente bajos.
Por otra parte, si los precios permanecen bajos muchos años, las empresas del upstream petrolero (extracción) tendrán menos recursos para exploración de nuevas reservas de petróleo. Esto sucedió después del oil-glut que siguió a la crisis petrolera de 1979, por lo que durante la década del 2000 la oferta no pudo acompansar el constante incremento de la demanda, siendo uno de los factores del fuerte precio del petróleo a finales de esa década.
La demanda de petróleo no es muy sensible (elástica) a las variaciones del precio a corto plazo. Las empresas y particulares seguirán consumiendo una cantidad similar de combustibles aunque se incremente su precio. Por contra, la demanda sí es mucho más sensible al crecimiento económico y de la renta.
Determinar y explicar el precio concreto es una cuestión muy compleja, pero los dos siguientes cuadros se exponen las sensibilidades o elasticidades de la demanda del petróleo en función del precio y renta de los diferente tipos de países.


Aunque las elasticidades o variaciones de las cantidades demandadas varía mucho según diferentes autores y modelos, en general se observa que un aumento del precio del petróleo, a corto plazo, varía poco su demanda. A largo plazo, la demanda sí varía más, y en países de la OCDE (con mayores recursos tecnológicos y económicos) incluso a largo plazo la variación es de 0,5 o más (un incremento de uno en el precio, hace disminuir 0,5 la demanda).
Con la renta, los países en vías de desarrollo incrementan la cantidad de demanda de petróleo en más de uno por cada unidad de renta adicional.
Dólar y precio del petróleo
Otro de los aspectos que hacen que el precio del petróleo no se correspondan con los modelos clásico de oferta y demanda, está en que el petróleo se rige por la moneda que ordena la economía mundial: el dólar de los Estados Unidos.
Si el tipo de cambio del dólar baja, también lo haría el precio real del petróleo respecto a otras divisas. Esto implica que los EE.UU., al incurrir en fuertes déficits comerciales y fiscales desde hace décadas, impactase negativamente en la cotización del dólar, depreciando el precio del petróleo en dólares.
Por consiguiente, para recuperar el poder adquisitivo de la producción petrolera los vendedores y productores comenzaran a incrementar el precio en las negociaciones y contratos.
Como se observa en el siguiente gráfico, al depreciarse el dólar sube el precio del petróleo; y cuando sube la cotización del dólar baje el precio del petróleo.

No obstante, como los últimos años los EE.UU. también se han convertido en exportadores de petróleo la correlación ya no es tan fuerte ya que el dólar se comportaría, en parte, como una petrodivisa. Otro factor podría ser que las compraventas de petróleo no se hicieran en dólares sino en divisa china, aunque las cantidades por ahora son testimoniales.
Por lo tanto, las variaciones del tipo de cambio del dólar por los déficits fiscales y de cuenta corriente de EE.UU., así como el privilegio excepcional de que el dólar se la moneda de reserva mundial, seguirán siendo un factor muy importante para comprender el precio del petróleo y que este no se corresponda con las cantidades de petróleo crudo producido y demandado.
Especulación financiera
El precio del petróleo, a corto plazo, puede llegar a estar muy influenciado por especulaciones financieras y no por los fundamentos físicos de oferta y demanda (como sí ocurre a largo plazo).
Como se demuestra en Oil price dynamics and speculation: A multivariate financial approach, la operadores financieros, cuando hay una gran volatilidad en el mercado, tienden a seguir estrategias de retroalimentación en las que apuestan por subidas del precio del petróleo cuando este aumenta, y a disminuciones en el precio cuando decrece, exagerando en el corto plazo al alza o la baja el precio del petróleo. No obstante, tampoco hay que exagerar la influencia de la especulación financiera, tanto por seguir estrategias de retroalimentación o por intentar refugiarse en el petróleo ante caídas en la cotizaciones en la bolsa o mercados de renta variable.


Política
Un último factor para comprender, a grosso modo, el precio del petróleo, está en el clima político internacional.
Muchos recordarán como el embargo petrolero de la OPEP a varios países occidentales por la guerra del Yom Kippur de 1973 tuvo un impacto considerable en la disponibilidad de petróleo en esos países y su efecto en los precios minoristas. También el efecto de la revolución islámica de Irán de 1979; las recientes sanciones contra Irán de la administración Trump; la guerra civil en Libia.
Una crisis de seguridad internacional también puede llegar a tener un efecto muy considerable en el precio, como pudo observarse en 1990 cuando Irak invadió Kuwait (más allá de los efectos en las cantidades en la oferta de crudo). Una crisis puede hacer subir el precio del petróleo por ser un valor refugio, anticiparse una hipotética escasez futura por una guerra potencial (que destruiría parte de la oferta), o bajar el precio si el conflicto ocurre entre dos países con gran influencia en la demanda de petróleo (caso de enfrentamiento de China contra EE.UU.).
La política también influye facilitando, o no, la constitución de monopolios u oligopolios. Durante muchos años, el imperialismo occidental permitió un monopolio de facto al acordar las principales petroleras occidentales la cláusula Gulf+, por la que todo precio del petróleo debería estar regido por el precio de extracción del golfo de México (muy superiores a otros) más los costes de transporte al mercado específico (según se estableción en 1928 por el cártel de las siete hermanas). A su vez, ese imperialismo permitía que la mayoría de las rentas petroleras las obtuvieran esas petroleras.
Por otra parte, la política de la OPEP, más allá del embargo de 1973, ha permitido que en asociación con Rusia, se establecieran limitaciones a la oferta de crudo, aunque el respeto a las cuotas de producción no haya sido, ni esté siendo, respetado debidamente por todos.