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Estas elecciones alemanas nos han dejado un resultado apretado como predecían las encuestas, dónde el SDP se ha impuesto por 2,5 puntosa la CDU. La CDU pierde casi 9 puntos y consigue el peor resultado de su historia en una catástrofe sin paliativos que pondrá muy difícil la continuidad de Laschet al frente de la Unión, aunque aún tiene posibilidades de gobernar.

1 Resultados electorales en Alemania.

El SPD consigue una victoria ajustada

El SPD consigue subir un 5% con respecto a las pasadas elecciones, si bien es un porcentaje alejado de las cifras que conseguía el partido socialdemócrata en antaño (de hecho, es su tercer peor resultado de la historia), teniendo en cuenta la situación actual que atravesaba el partido es un gran resultado. Más aún si tenemos en cuenta que hacía más de 20 años que el SPD no superaba en votos a la CDU.

2 Trasvase de votos hacia el SPD. Fuente: Tagesschau

El SPD consigue ese impulso siendo capaz de sustraer electorado a la mayoría de partidos desde la izquierda post-comunista de Die Linke hasta los liberales del FDP pasando por los conservadores de la CDU. Es entre el bando conservador dónde los socialdemócratas consiguen el mayor trasvase de votos, casi 1.400.000 votantes de la CDU se pasaron al SPD.

El motivo de este movimiento electoral tiene que ver con la todavía canciller Ángela Merkel, Merkel destacó por su capacidad para incorporar demandas de otros partidos, especialmente del SPD, a su agenda y así disputarles electorado. Esta estrategia ha sido profundamente eficaz ya que, si excluimos las elecciones de 2005 dónde se presenta por primera vez y consigue vencer por un solo punto, en las elecciones siguientes no conseguiría nunca una victoria por menos de 10 puntos. Sin embargo ahora Merkel se marcha y ese electorado tradicionalmente socialdemócrata que había logrado captar (los conocidos como “Merkel sozis”) están volviendo a  casa.

Los Verdes: ¿Puede un éxito ser decepcionante?

El partido que más sube en estas elecciones son Los Verdes, que consiguen sumar casi 6 puntos obteniendo así el mejor resultado de su historia y convirtiéndose en el tercer partido de Alemania, superando al FDP y AfD.

3 Trasvase de votos hacia Los Verdes. Fuente: Tagesschau

Este impulso de Los Verdes proviene de votantes en todas direcciones, consiguen captar electorado en todos los espectros políticos, incluido la extrema derecha. Al igual que ocurre con el SPD, los Verdes reciben el mayor influjo de votos de los conservadores, la CDU ha perdido más de 2 millones de votos entre el SPD y Los Verdes.

A pesar de que la noche de los Verdes es un éxito comparado con sus resultados de 2017, en este ciclo electoral se respiraba un ambiente de decepción porque hace tan sólo unos meses las encuestas les colocaban en primer lugar llegando al 25% y, finalmente, han sido terceros con un 14%, por lo que existe un sentimiento de oportunidad perdida que ha marcado tanto el final de la campaña como la noche electoral verde.

FDP: Kingmaker

Por su parte, no podemos calificar la noche electoral del FDP (el partido liberal) de éxito, su subida no llega ni a un punto y se quedan en el 11,5%. Viendo que la CDU pierde casi 9 puntos y AfD pierde más de 2, que el FDP solo logre sumar un 0,8 cuando los partidos de derechas pierden 11 puntos es, cuanto menos, decepcionante.

4 Trasvase de votos hacia el FDP. Fuente: Tagesschau

De hecho la situación podría haber sido bastante peor para los liberales sino fuera por el desastre de la CDU. Reciben 470.000 votos de los conservadores, casi el mismo número que pierden hacia socialdemócratas y Verdes, lo que les permite amortiguar la caída y subir un mínimo porcentaje gracias a las ganancias que proceden de AfD y Die Linke. Quizá el dato más sorprendente de la jornada sean esos 120.000 votantes que abandonan a la izquierda heredera de la RDA y se pasan a los liberales, quizá este era un voto táctico que pretendía influir en la posible coalición de gobierno pero no deja de sorprender la transición desde el comunismo al liberalismo.

Aun así, en el FDP pueden estar más que contentos, siguen siendo el Kingmaker, de ellos depende la formación del nuevo gobierno. De las únicas tres coaliciones posibles, el FDP es decisivo (junto con los Verdes)en dos de ellas, por lo que tendrán un gran poder de negociación que prácticamente les garantiza un lugar en el nuevo gobierno a pesar de sus discretos resultados.

Die Linke: El hundimiento

En 2017 Die Linke consiguió más de 4 millones de votos de los que anoche perdió la mitad. Es el gran perdedor de la jornada, pierde la mitad de su electorado y no llega a la barrera nacional del 5% (conseguirán entrar en el reparto de escaños gracias a los mandatos directos). Incluso en el este, su gran feudo electoral, sus resultados dejan mucho que desear. Sólo hay un partido con menor intención de voto que Die Linke en el este, el FDP (y sólo por tres décimas) todos los demás partidos le superan. En 2017 Die Linke superó al SPD por 4 puntos en el este, ayer el SPD sacó 14 puntos más.

5 Trasvase de votos hacia Die Linke. Fuente: Tagesschau

¿Dónde han ido los votos de Die Linke? En todas direcciones, si Los Verdes ganaban electorado de todos los partidos la otra cara de la moneda es Die Linke, que los pierde con todos. Buena parte de su electorado (370.000) se fueron a la abstención, síntoma de una campaña que no consiguió movilizar a los suyos ni para evitar que el partido se quedara fuera del reparto de escaños.

La pregunta ahora es hacía donde se dirige el partido después de estos resultados. La cohesión interna en Die Linke siempre se ha sostenido gracias a un equilibrio muy frágil que podría romperse tras una debacle como esta, más aun sabiendo que hace tan sólo unos días los dirigentes del partido hablaban de su inclusión en la próxima coalición de gobierno por primera vez en su historia.

¿Y ahora qué? Posibles coaliciones

6 Coaliciones Posibles. Fuente: Die Zeit

Con los números en la mano las posibilidades más realistas de coalición son un semáforo (SPD+Verdes+FDP) o Jamaica (CDU+Verdes+FDP). Sería la primera vez que se forma una coalición de tres partidos y ambas tienen el mismo problema, la dificultad para poner de acuerdo a Verdes y Liberales. Son los partidos más alejados entre sí de los que podrían entrar en el gobierno y sus políticas fiscales y de inversión son radicalmente opuestas, con Los Verdes a favor de subir los impuestos y crear nuevas tasas para financiar un gran paquete de inversión pública que impulse la transición ecológica, mientras que los liberales se oponen a cualquier subida de impuestos y quieren reducir las regulaciones y el tamaño del estado para impulsar la economía.

Parece difícil cuadrar ambas pretensiones pero ambos partidos ya se han puesto a trabajar. Antes de la campaña ya hubo contactos informales entre representantes del FDP y Los Verdes para intentar coordinarse en las negociaciones de la futura coalición y, de hecho, existe un precedente.

En Schleswig-Holstein se produjo una situación similar a la que tenemos ahora, Verdes y Liberales eran necesarios para la futura coalición de gobierno, el SPD pretendía negociar con los Verdes y presentarle un acuerdo al FDP sabiendo que ya, sin los verdes, no tendría más opción que aceptarlo o irse a la repetición electoral porque no podría construir alternativa por sí solo. La CDU por su parte intentaba hacer lo mismo, llegar a un acuerdo con el FDP y presentárselo a los Verdes como única opción o, de lo contrario, se repetirían las elecciones.

Tanto Los Verdes como el FDP vieron que esta situación no les convenía porque dejaba todo el poder negociador en manos de los partidos grandes y decidieron unirse. Primero negociaron entre ellos y llegaron a un acuerdo que presentaron tanto a la CDU como al SPD, de tal manera que aquel que lo aceptase accedería al gobierno. Finalmente acabó aceptando la CDU y se formó una coalición Jamaica.

Composición del parlamento de Schleswig-Holstein. Autor: JackWilfred

La política federal es muy distinta de la regional y es más difícil que una circunstancia así se repita pero los Liberales ya han dejado claro que buscan replicar este modelo y pretenden poner sede acuerdo primero con Los Verdes, algo a lo que Los Verdes se han mostrado abiertos. Así las cosas la formación del nuevo gobierno dependerá de quién esté más dispuesto a ceder, si Scholz o Laschet. Para Laschet podría ser su última oportunidad política ya que, con estos resultados, si no logra conseguir la cancillería será destituido con toda seguridad, mientras que para Scholz, quien tiene fama de gran negociador, es probablemente su única oportunidad de ser canciller teniendo en cuenta que estas elecciones han girado en torno a la figura de Merkel, lo que le ha beneficiado mucho y no volverá a repetirse.

Ambos tendrán que tratar de coordinar las demandas de sus socios menores con las de su propio partido si quieren formar una coalición exitosa. En el caso de Scholz, la dirección del partido está en manos del sector izquierdista y miran con recelo a un acuerdo de coalición que ceda mucho a los liberales, mientras que en el de Laschet está cuestionado desde el principio con personalidades como Markus Söder esperando que sus intentos fracasen para hacerse con el liderazgo.

Podría producirse también la situación contraria, si los partidos pequeños se sobreestiman y exigen demasiado se arriesgarían a incentivar que los grandes partidos se unan e intenten rehacer una gran coalición aunque esta vez liderada por el SPD. Es improbable, pero no imposible, será la última opción pero si las conversaciones se alargan y no parece que el acuerdo del Semáforo o la Jamaica esté próximo, ambos partidos empezarán a considerar esa posibilidad que, al fin y al cabo, solo tendría que cambiar algunos de los puestos en el gobierno actual.

"Canciller Crimen", portada del periódico Bild.

En definitiva, las elecciones en Alemania nos han dejado un escenario con una debacle de los conservadores, pero con unos socialdemócratas con mucho menos margen de maniobra del que esperaban tras el colapso de Die Linke y, al final, el acuerdo dependerá de la capacidad para entenderse de dos partidos, Verdes y FDP, con muchas más diferencias que similitudes.

El último gobierno de Alemania tardó 172 días en formarse, estas negociaciones tienen todos los elementos para superarlo y que no se constituya el nuevo gobierno hasta 2022. Tendremos nuevo discurso de navidad de Merkel.

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