Zaragoza: el antes y después de las Expos españolas.


Hoy celebramos el undécimo aniversario de la apertura de la última “Expo” que tuvo lugar en España, concretamente en Zaragoza, y que situó como motivo central el agua. ¿Qué aspectos positivos y negativos trajo consigo este evento de tan grandes dimensiones? ¿Fue mejor que las ediciones anteriores? ¿Qué resquicios quedan de aquellos lodos? ¿Hablamos de éxito o de fracaso? ¿Se esperan más Exposiciones en España? Respondamos a estas preguntas.
La Exposición Internacional de 2008, con candidatura presentada en 2003 y sede en Zaragoza, tenía como lema “El agua y el desarrollo sostenible” y la mascota “Fluvi”. Un tema totalmente en boga desde hace años, y, por desgracia aún en auge. Precisamente, ese es el objetivo genérico de las exposiciones universales, internacionales…intentar encontrar una solución a los grandes problemas que afronta la sociedad del momento. Eso es al menos lo que se pretendía ya entonces y se propone, en especial, para futuras ediciones donde la tecnología pueda ayudar.
Concretamente allí, las miradas se centraban en el río Ebro, y la fecha coincidía con el bicentenario de los dos asedios sufridos en Zaragoza. Como objetivos concretos, estaban informar de todos los retos que había y de los cuales algunos perduran en la línea señalada, formar a través de actos técnicos y científicos en la Tribuna del Agua, y divertir con todas las actividades de entretenimiento para jóvenes y adultos.
El conjunto de la Expo incluía stands y pabellones dedicados al cambio climático, control del agua, uso de las energías limpias y renovables…Todo aquello que empezaba a crecer justo entonces, y que como decíamos, se tenía que promover. Igualmente, había pabellones de áreas concretas como África Subsahariana o América Latina por su relación económica con España.
Si echamos la mirada atrás, no es la primera vez que este país es anfitrión de estos eventos, sino que Barcelona y Sevilla han recibido por duplicado actividades similares. La primera Expo Universal española fue en Barcelona, después vino la Iberoamericana en Sevilla, a continuación, la primera recibe una Internacional, y finalmente Sevilla ostenta la última Exposición Universal de nuestro país en 1992.
Es importante explicar, una vez que se han mencionado todas las que hemos albergado, que la Oficina Internacional de Exposiciones (Bureau International des Expositions), con sede en París y de la que España es orgulloso miembro fundador desde 1928, distingue entre Universales/Registradas e Internacionales/Reconocidas, según su duración. Véase, la última que estamos analizando, abarcó del 14 de Junio de 2008 al 14 de septiembre del mismo año y fue Internacional y la primera con el sobrenombre “especializada”, al tratar un tema tan concreto y en un máximo de 3 meses.
Si medimos en cifras, cuestión que no afecta a esa determinación del BIE puesto que solo es posible hacer sondeos previos, se tasaron en 5.650.943 los visitantes en diferentes pases diarios, nocturnos o de temporada y en 104 los países participantes.
Además de los asistentes, llama la atención la cifra de 2000 expertos que impartieron conferencias del mundo de la ciencia, la ingeniería, la investigación… así como la apertura del evento a cargo de Bob Dylan y el cierre en manos de Philip Glass[1]. Todas estas personalidades de prestigio internacional dan cuenta de la importancia de este tipo de celebraciones y del dinero que se moviliza en ellas.
Si hablamos de espacio, se trató de un complejo de 25 hectáreas, con los criterios verdes impuestos cumplidos, y divididas en 8 secciones: islas, oasis, bosque húmedo, bosque templado, hielo y nieve, montañas, ríos, llanuras y praderas.
Entre los edificios destacaban el Pabellón Puente o los de España y Aragón, así como el Palacio de Congresos, y la Torre del Agua como símbolo total de esta Expo creado para mostrar a los visitantes el valor de este bien desde su propia base con forma de gota. Todos ellos se gestaron con el propósito de ser usados a posteriori[2]. Más allá de los propios edificios, también era majestuosa la entrada y notorios los más de 3000 espectáculos a desarrollar durante el evento.
De hecho, hay quien piensa, que la Exposición se creó para mejorar la calidad urbanística y el propio nivel de vida de los vecinos de Zaragoza. Pero, ¿qué hay de cierto en esto? Pues bien, se han construido muchos edificios para esta celebración, que están tardando en dar sus frutos, y de primeras parece que han arruinado al territorio, que hoy intenta recuperarse.
Vayamos un paso más allá; se puede ya vislumbrar qué será de todas esas construcciones, gran parte de las cuales funcionan y seguirán bajo directrices de Zaragoza Empresarial y dentro del llamado parque Dinamiza Empresarial intentándose, en todo momento, respetar la estructura original del complejo. Prueba de ello es que, sin ir más lejos, han participado los arquitectos de Zaha Hadid en el planteamiento de las obras para cerrar el Pabellón Puente, aquellos que ya diseñaron la famosa puerta de acceso a la Expo. El Frente Fluvial será lo último en reconvertir.
En este 2019 se adjudicarán las obras de los edificios pendientes puesto que saldrán en breves semanas a concurso, y empieza así el fin de la reconversión del recinto de la Exposición 2008 con una futura inversión hasta 2021 y ya ostentando un 80% del espacio arrendado para oficinas de más de 50 empresas y casi 4000 trabajadores. De momento, se ubicará Mobility City, que es la primera decisión clara dentro Zaragoza Empresarial para esta área, al igual que ya está instalada la primera señal española direccionable interactiva para geolocalizar, orientar e informar en 360 grados[3].
Si comparamos con las otras Expos, sus vestigios están presentes, por ejemplo, en el parque temático Tierra Mágica de Sevilla aún hoy abierto (aunque desde muchos años genera más pérdidas que ganancias) o el Arco del Triunfo de Barcelona como monumento de este estilo único en España.
Las consecuencias de la Expo fueron muchas, pero hubo una destacada porque se convirtió en la primera ciudad sede de Naciones Unidas del país: United Nations International Decade for Action: Water for Life 2005-2015.
A nivel económico se trató de una inversión de 700 millones de euros de los cuales aún se deben más de 260. Prácticamente todos los años salen nuevas deudas o negocios clandestinos al respecto como contratas morosas.
Rescatemos finalmente, unas ideas que podrían dar visos del calificado como fracaso desde la propia organización del concepto teórico y base de la Expo porque algunos de sus miembros concluían que el esfuerzo y especialmente el dinero de este tipo de eventos se podría invertir directamente en resolver los problemas de agua. Naciones Unidas data en una cifra muy elevada la necesidad de este bien en el mundo y especialmente en países con stand propio en aquella Expo, y por tanto si se invirtiesen las ganancias en ello, o directamente no se celebrasen y se aportasen a esa causa, sería de mucha más ayuda. Igualmente, si se quiere mejorar el medio ambiente, y concienciar de que esto es necesario, los expertos serían más útiles en charlas a jóvenes o emprendedores, que en stands a visitantes.
Para concluir, no hay más que pensar que no se han celebrado más expos para intuir que no todo salió como se esperaba. Ha sido sonado internacionalmente el nombre de España con respecto a las anteriores exposiciones, y especialmente Sevilla’92, pero ¿quién se acuerda de Zaragoza 2008 más que sus vecinos maños? Seamos francos, ni si quiera la web de la Expo aporta información de sus stands o espectáculos celebrados porque no funciona adecuadamente, pero sin embargo sigue activa para el enlace con Zaragoza Empresarial.
En cualquier caso, esto no es el fin. De momento, si algo está
claro, es que España participa en las exposiciones desde la primera en Londres
1851 y es activa en publicidad y actos al respecto. Ya está anunciado que
asistirá a la próxima Exposición Mundial de Dubai 2020 como estuvo en las del
mismo calibre de Hannover, Shanghái y, más recientemente Milán 2015.
[1] Revisado a 10.6.19 https://www.bie-paris.org
[2] Revista Casas de Aragón, de las Comunidades Aragonesas del Exterior. Diciembre 2007, número 7. https://www.aragon.es/estaticos/ImportFiles/26/docs/Areas/Aragoneses%20exterior/Revista/7/CASAS_ARAGON_7_COMPLETO.pdf
[3] Revisado a 10.6.19 http://www.expozaragozaempresarial.com/